Trump reclama a China por no comprar soya estadounidense; China responde responde: ‘No tenemos interés alguno en depender de Estados Unidos’

El Gobierno de China advirtió que una guerra comercial con Estados Unidos no traerá beneficios para ninguna de las partes, luego de que el presidente estadounidense, Donald Trump, calificara como un “acto económicamente hostil” la decisión de Beijing de no adquirir soya estadounidense.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Lin Jian, reiteró que la postura de su país “es coherente y clara”, subrayando que “los asuntos económicos y comerciales deben resolverse mediante consultas basadas en la igualdad, el respeto y el beneficio mutuo”.
Las declaraciones se producen tras la reciente escalada de tensiones entre ambas potencias, derivada de la decisión de China de suspender sus compras de soya a Estados Unidos, uno de los mayores productores mundiales, especialmente en el Medio Oeste.
El Gobierno chino mantiene desde hace meses un arancel del 34% sobre la importación de soya estadounidense, que en 2024 representó el 21% del total de sus compras internacionales del grano, utilizado principalmente para la alimentación animal.
En agosto, Trump instó públicamente a Beijing a “cuadruplicar” sus pedidos; sin embargo, analistas de la consultora Trivium advirtieron que China ha venido fortaleciendo su independencia alimentaria mediante el aumento de importaciones desde Sudamérica, así como el impulso a la producción local y una reducción en el uso del grano para el ganado.
“Los líderes chinos no tienen interés alguno en volver a depender de Estados Unidos para su seguridad alimentaria”, sostuvo la firma.
Por su parte, la cuenta oficial Yuyuan Tantian —vinculada a la televisión estatal CCTV— alertó que Estados Unidos podría perder hasta 16 millones de toneladas en pedidos de soya si China no reanuda sus compras a mediados de noviembre.
“Perder a China significa perder la mitad de su mercado”, subraya la publicación.